El trabajo en grupo de forma colaborativa es un ámbito efectivo para el desarrollo de actitudes cívicas y sociales como la comunicación efectiva, el respeto a los demás, la tolerancia, la responsabilidad compartida, la contribución en proyectos comunes, donde los estudiantes fortalecen su crecimiento personal en su doble dimensión individual y social. Estos objetivos se logran en un ambiente de respeto donde cada alumno se siente aceptado por los demás y siente seguridad al expresar sus opiniones, lo cual supone un gran reto para el profesor.
A continuación ofrecemos algunas ideas prácticas que pueden ayudar al profesor a dirigir una sesión colaborativa con éxito:
- Arreglar el espacio de tal manera que los participantes se puedan ver de frente y se genere más fácilmente la comunicación.
- Dirigirse a cada miembro del grupo por su nombre.
- Detonar la discusión con una actividad que despierte el interés de los participantes.
- Evitar preguntas que se puedan contestar con una sola palabra.
- Establecer al inicio de la discusión las normas y comportamientos esperados durante la discusión.
- Escuchar cuidadosamente a la persona que está hablando y comunicar, verbal y no verbalmente, que está atento a su participación.
- No evaluar las contribuciones ni implícita ni explícitamente; más bien conducir la discusión con preguntas hacia el objetivo.
- Promover la interacción de todos los miembros evitando un
monólogo del líder del grupo.
- Si el expositor se dirige exclusivamente al profesor, éste debe mirar hacia los demás para promover que aquél se dirija también a todos.
- Invitar de manera sutil a los miembros que no están participando a que se integren a la discusión sin exponerlos ante los demás.
- Esperar un tiempo adecuado, después de hacer una pregunta, para que se pueda pensar la respuesta.
- Redireccionar las preguntas que hagan al profesor, hacia los otros miembros del grupo, cuando sea posible y apropiado.
- Controlar la discusión, a través de preguntas, en lugar de hacerlo a través de afirmaciones.
- Manifestar confianza en los miembros de su grupo y mantener siempre la calma cuando surja hostilidad entre ellos.
Si desea ampliar o profundizar en este tema, puede visitar el libro El modelo educativo del Tecnológico de Monterrey de la doctora Marisa Martín, 2002, en: http://www.sistema.itesm.mx/va/dide/libro/home.htm
* La Dra. Martín es directora de Investigación y Desarrollo Educativo de la Vicerrectoría Académica.