Investigación de A C
El uso del aprendizaje colaborativo ha generado una gran cantidad de estudios tendientes a mostrar su efectividad como herramienta didáctica para el desarrollo de aprendizajes en el estudiante.
Estos estudios han permitido consolidar al aprendizaje colaborativo como técnica didáctica pero al mismo tiempo han alertado acerca de la cantidad de variables que inciden durante el proceso.
Estudios
Evaluar el Aprendizaje Cooperativo
Este estudio se realizó con el propósito de establecer un instrumento, combinando escalas previamente establecidas, que permitiera medir la efectividad del AC en tres variables específicas del estudiante: sentido de pertenencia al campus, apertura a la diversidad, y procesamiento en grupo.
Durante el año escolar 1999-2000, una universidad del sur de los EU, invitó a 30 profesores a participar en un proyecto que permitiera a los investigadores recoger información en sus cursos al inicio y al final del semestre. Seis de estos profesores fueron aceptados dentro de un fondo de investigación. A estos profesores se les pidió incorporar técnicas de aprendizaje cooperativo en su curso utilizando estrategias aprendidas en un curso de capacitación organizado por los investigadores.Los restantes 24 profesores acordaron participar como grupo control. Estos profesores no participaron en el taller de capacitación de aprendizaje cooperativo. Los estudiantes de los grupos control y de estudio llenaron encuestras antes y después de la prueba aproximadamente a dos semanas del inicio y dos semanas después de terminado el semestre.
ver estudio
Evolución de la Investigación en Aprendizaje Colaborativo
En términos de la investigación empírica, el objetivo inicial era establecer dónde y bajo qué circunstancias el aprendizaje colaborativo era más efectivo que el aprendizaje individual. Los investigadores controlaban diversas variables independientes (tamaño del grupo, composición del grupo, naturaleza de la tarea, medios de comunicación, etc.). Sin embargo, estas variables interactuaban entre sí, de tal manera que hacía casi imposible establecer las relaciones causales entre las condiciones y los efectos de colaboración. Por tal razón, los estudios empíricos han empezado a enfocarse menos en establecer los parámetros para la colaboración efectiva y más en tratar de entender el papel que cada una de las variables juega en mediar la interacción. Este movimiento hacia un mayor registro orientado al proceso requiere nuevas herramientas para analizar y modelar las interacciones.
ver estudio