Luis Barragán fue un artista solitario y silencioso, que vivió lejos de los bandos y de la superstición del arte comprometido; en vez de usar palabras usó el concreto como medio de expresión.

La fonética, la gramática y la semántica no tienen cabida dentro de este medio; en su lugar, la magia y la sorpresa son las únicas reglas ejercidas en su arquitectura. “Se trata de encontrar sorpresas al caminar por cualquier calle y al llegar a cualquier plaza”, como el afirmaba.

Es importante mencionar que la primer etapa de su obra se desarrolla en Guadalajara en donde junto con Ignacio Díaz Morales, Rafael Urzua y Pedro Castellanos formaron el Grupo Tapatía. En esta etapa, la infancia de Barragán en las haciendas y pueblos de Jalisco juega un papel importante dentro de una búsqueda propia por resaltar la tradición de sus raíces a través de una arquitectura

 


  de materiales tradicionales, sin mayor pretensión alguna.

QUIÉN
ES
LUIS
BARRAGÁN